Parecía ser una noche especial para el pequeño niño. Se estaba arreglando en su habitación, junto a su perro, su ranita y su tortuguita. Ellos estaban tristes porque el niño iba a salir a cenar con su familia. El niño-- la ranita no_ dudó en meterse en su bolsillo, como siempre, tan traviesa. Llegó al restaurante con su familia. Todos estaban contentísimos # pero la rana, en cuanto pudo, empezó a hacer de las suyas. Entró en la trompeta de la banda. # Al entrar en la trompeta se_-- notó que no sonaba bien entonces el_ el músico miró la trompeta # y_ de repente le cayó la ranita en la cara. Todo empezó a ser como un espectáculo. El tambor se rompió. La rana no dudó en saltar a la bandeja que llevaba un camarero, muy elegante. # La noche continuaba y la rana seguía haciendo de las suyas. Estaba dentro de un plato esperando el llegar el momento para_ hm para hacer una sorpresa a una mujer muy elegante. De repente salió y volvió a saltar en una copa de otra_ pareja muy elegante. La pareja estaba contenta hasta que se dio cuenta que dentro su vaso había una rana y que le besó la nariz. # Todo el mundo estaba sorprendido. Realmente eso parecía un espectáculo. El camarero no dudó en atrapar a la ranita. Así que cogió a la ranita de los pies y se la llevó para fuera del restaurante. Entonces el niño se dio cuenta que su ranita estaba en el bar, bueno, en aquel restaurante. Su familia su- muy extrañada fue a reclamar su rana. Así que todos se fueron del restaurante y lo que parecía ser una noche espléndida acabó siendo un fracaso. La familia se fue enfadada y riñó al niño y a su rana. El niño parecía triste llendo par- hacia su habitación, pero cuando llegó no se paró ni tres segundos en reírse de todo lo sucedido.